Memorias de un pionero y abridor de sendas

[Guatemala] s.e. 2002

56 p. 21

El precio total evangelio fue pagado en la cruz. El costo fue el derramamiento total de la vida del único ser en quien la dimensión de humanidad fue alcanzada en plenitud.Y fue así, por una muestra del amor entrañable de Dios, que Él alcanza a un mundo necesitado de amor y de compasión. Por la simple razón que el amor de Dios conquistó el corazón del hermano mateo Mendoza, y porque ese amor rebasó los límites de su corazón, es que se ha extendido hacia su pueblo, y la vida del hermano Mendoza se proyectó en presencia y testimonio en las comunidades. Su amor a Dios ha quedado compilado en estas remembranzas de un hombre y un pueblo, y donde el poder del Dios soberano y único rebasa los linderos del tiempo y las generaciones y se extiende para cubrir muchas generaciones.